Formación de personas y de Comunidades Cristianas.
Resumen
Existe confusión en la formación de personas con comunidades cristianas.
El autor quiere aclarar que el formador verdadero es alguien distinto a un activista, a un proselitista o a un dictador.
La formación para quienes quieren ser cristianos es una invitación y formar en términos cristianos, consiste en mostrar de una manera viva, personal y convencida, a Jesucristo.
Don Carlos, muestra aquí que la formación de personas no está definida por fórmulas, sino que es un camino, un avance. Así mismo reconoce algunos puntos que no van por el camino correcto a la hora de efectuar esto.